
México y Colombia rechazan asistir a la Cumbre de las Américas
Los presidentes de Colombia y México, Gustavo Petro y Claudia Sheinbaum, respectivamente, anunciaron de forma independiente su ausencia a la próxima Cumbre de las Américas, prevista para diciembre próximo, en República Dominicana. El motivo central de ambos mandatarios es un enérgico rechazo a la exclusión de Cuba, Nicaragua y Venezuela del evento, enviando un mensaje claro sobre su visión de una integración regional sin vetos.
El presidente colombiano, Gustavo Petro, fue más allá de una simple justificación. Su anuncio estuvo enmarcado en una crítica abierta a lo que percibe como una política de exclusión liderada por Estados Unidos. "El diálogo no comienza con exclusiones", declaró, subrayando el principio que guía su política exterior.
Petro reveló que había propuesto un encuentro entre la CELAC y Estados Unidos para discutir la integración económica de una "gran América", una iniciativa que, según denunció, no obtuvo respuesta. En su lugar, alertó sobre una "agresión en el Caribe", sin dar más detalles, pero marcando un preocupante quiebre en una zona que había mantenido su condición de espacio de paz.
El mandatario también destacó los avances en la proyección global de la región a través de alianzas con Europa y China, centradas en conocimiento, energías limpias e inteligencia artificial. Su visión es clara: ampliar los vínculos con África, Medio Oriente e India, mientras se consolida internamente con proyectos concretos como una red de energía limpia, la producción de medicinas y la integración amazónica. "Vinculándose con todo el mundo sin excepciones y sin subordinaciones", puntualizó.
Por su parte,la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, fue tajante en su conferencia matutina desde el Palacio Nacional: "No, no voy a asistir". Su argumento combinó un principio de política exterior con una emergencia nacional. "Nunca estamos de acuerdo con que se excluya a ningún país", afirmó, alineando su postura con la de su predecesor y mentor, Andrés Manuel López Obrador.
Sheinbaum añadió que la actual emergencia por las inundaciones en el centro de México, que ha dejado al menos 64 fallecidos, requiere su atención directa en el país. Sin embargo, dejó abierta la puerta a una representación de menor nivel, indicando que su gobierno evalúa si un funcionario de la Secretaría de Relaciones Exteriores podría acudir.
La decisión conjunta de dos de las mayores potencias de América Latina no es un hecho aislado. Representa una grieta significativa en el tradicional foro de diálogo interamericano y señala el fortalecimiento de un bloque que prioriza la autodeterminación y la cooperación Sur-Sur.
Este boicot, con la exclusión de tres países como telón de fondo, deja en evidencia la creciente fractura entre una parte de la región y la política exterior de Washington, al tiempo que anuncia una era de mayor asertividad latinoamericana en el escenario global. La Cumbre de las Américas se celebrará, así, bajo la sombra de estas ausencias y los cuestionamientos sobre su futuro como espacio de consenso.
Fuente: Cuba X Siempre