El Museo Nacional de Historia Natural de Cuba invitó al público a disfrutar de su programa lleno de actividades emocionantes y educativas, desde mañana martes y hasta el próximo domingo, durante la semana de receso docente en el país.

La dirección de la institución anunció sus propósitos a la Agencia Cubana de Noticias, en el sentido de que habrá coloquios informativos, proyecciones de documentales y recorridos por senderos de indagación.

También está prevista la observación de la naturaleza citadina, presentaciones de ejemplares únicos y visitas guiadas para que puedan descubrirse todos los secretos que guarda el centro, cuyos antecedentes datan de 1960.

Entonces, y por indicaciones del Comandante en Jefe Fidel Castro, se anunció la intención de crear el Museo Cubano de Ciencias Naturales y la formación de la comisión correspondiente, presidida por el capitán Antonio Núñez Jiménez e integrada por naturalistas y otros intelectuales.

Miguel Luis Jaume García (1907-1990), zoólogo autodidacta y destacado en las especialidades de la Malacología y la Entomología, figuró entre los primeros en formar parte de ese grupo, en unión de Gilberto Silva Taboada (1927-2022), de relevantes aportes a la Mastozoología cubana, sobre todo en el orden de los quirópteros y en la fauna cavernícola.

Desde su constitución, esta comisión se encargó de aunar a los curadores y otros especialistas, así como de reunir colecciones dispersas en la nación, tanto de instituciones como de la Real Academia de Ciencias Médicas, Físicas y Naturales de La Habana, y centros escolares nacionalizados.

El 26 de mayo de 1964 quedaron inauguradas y abiertas al público cubano y extranjero 26 salas de exhibiciones que abarcaban perfiles zoológicos, botánicos, geológicos, etnográficos y arqueológicos, con el nombre de Museo de Ciencias Felipe Poey.

Entre sus espacios expositivos más visitados y populares, se encontraban la reproducción a escala natural de la Cueva número 1 de Punta del Este, de la Isla de la Juventud, caracterizada por las pictografías aborígenes que conserva, y el Planetario de La Habana.

La institución experimentó un proceso de reorganización en 1986 para convertirse en Museo Nacional de Historia Natural y el 6 julio de 1999 reabrió sus puertas, en su nueva sede, en la Plaza de Armas del centro histórico de la Habana Vieja.

Sus muestras incluyen El Museo por Dentro, Historia de la Tierra y de la Vida, Mamíferos, Aves y Reptiles de Otras Partes del Mundo, y Naturaleza Cubana y Patrimonio Cultural, este último con colecciones taxonómicas, fondos de exhibición exponentes y documentarios.

Pone a disposición del visitante la Sala Infantil Colibrí, que, dirigida a niñas y niños tiene un carácter lúdico, la Sala de Video Almiquí, la Biblioteca Especializada Miguel Luis Jaume y el Centro Docente.

(Tomado de ACN)

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