Al amanecer de este domingo, el presidente Miguel Díaz-Canel encabezó el acto político y militar en conmemoración del aniversario 129 de la caída en combate del Lugarteniente General Antonio Maceo y su ayudante, el capitán Panchito Gómez Toro.

La ceremonia, celebrada en el sagrado mausoleo de El Cacahual, también recordó el aniversario 36 de la Operación Tributo, cuando los restos de los internacionalistas cubanos caídos en misiones en el extranjero fueron repatriados.

Se depositaron ofrendas florales a nombre del pueblo de Cuba no solo ante la tumba del "Titán de Bronce" y su joven ayudante, sino también ante los monumentos de Juan Fajardo Vega, el último mambí, y Blas Roca Calderío.

La voz de las nuevas generaciones estuvo presente a través de Daileris Verdecia, pionera ganadora del concurso "Amigos de las FAR", quien afirmó que "Maceo y Panchito vivirán siempre en nosotros, los pinos nuevos".

Por su parte, el cadete Brayan Hidalgo Torres, de la Escuela Interarmas "General Antonio Maceo", reafirmó el legado de lucha al dirigirse simbólicamente al imperio con la histórica frase: "Quien intente apoderarse de Cuba, recogerá el polvo de su suelo anegado en sangre, si no perece en la lucha".

El miembro del Comité Central del Partido, José Ramón Monteagudo Ruiz, pronunció el discurso central, destacando a Maceo como un "genio militar y revolucionario de sólidos principios", cuya Protesta de Baraguá salvó la causa independentista. Frente al recrudecimiento del bloqueo económico, Monteagudo llamó a la unidad como arma estratégica: "El legado de Maceo nos llama a luchar con firmeza y optimismo. No hay espacio para concesiones al enemigo".

El acto contó con la presencia de altos dirigentes del Partido, el Gobierno, las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) y el Ministerio del Interior, junto a representantes estudiantiles, combatientes y familiares de los caídos, reafirmando en la temprana hora la continuidad del ideal revolucionario.

Fuente: Presidencia de Cuba