Cada 30 de noviembre, el calendario marca una cita ineludible: el Día Internacional de la Seguridad Informática. Más que una simple celebración, esta fecha actúa como un recordatorio global de la crítica importancia que tiene proteger nuestra información en un ecosistema digital en constante expansión.

En un mundo donde nuestras vidas, trabajos y relaciones se desarrollan en línea, los datos se han convertido en un activo invaluable. Sin embargo, esta hiperconectividad trae consigo riesgos crecientes: ataques de ransomware, suplantación de identidad, robo de datos y vulnerabilidades en sistemas críticos son amenazas latentes que pueden afectar desde un individuo hasta una nación entera.

La efeméride busca concienciar que la ciberseguridad no es solo una tarea de los expertos o de las grandes corporaciones. Es una responsabilidad compartida. Pequeñas acciones individuales y empresariales construyen una gran diferencia:

· Contraseñas robustas y autenticación en dos pasos.

· Actualizaciones constantes de software y sistemas operativos.

· Educación continua para identificar intentos de phishing y otras estafas.

· Copia de seguridad regular de la información crítica.

Este día sirve como una llamada a la acción. Un momento para reforzar nuestras defensas digitales, promover buenas prácticas y entender que, en la era de la información, la seguridad informática es sinónimo de protección de nuestra privacidad, nuestra economía y nuestro modo de vida. La prevención hoy evita las crisis del mañana.

Fuente:  Perfil Dirección Provincial de Salud La Habana