Este Primero de Mayo vuelve a ser historia para la Plaza de la Revolución que se vistió de Cuba al ser protagonista de un multitudinario desfile del pueblo trabajador movilizados en masa compacta para mostrar al mundo la fuerza de nuestra verdad y de nuestras ideas.

En La Habana, este Primero de Mayo, más de 600 mil capitalinos marcharon por Cuba, contra el Bloqueo injusto y genocida que durante más de seis décadas se nos impone desde las diferentes administraciones de los Estados Unidos.

Junto a Raúl, líder histórico de la Revolución, nuestro General de Ejército, de nuevo Cuba volvió a demostrar que no estamos obligados, pero que estamos resueltos  a empujar un país, y que ¡Sí se pudo!, ¡Sí se puede! Y ¡Sí se podrá! Porque somos fuerza pujante que conocemos el camino escogido, y junto a nuestros padres fundadores por la independencia, levantamos y levantaremos la bandera de la estrella solitaria para confirmar que esta Isla siempre será “Mambisa y Soberana”.

En esta jornada en la que festejamos el Día de los Trabajadores, se inició el desfile con un gran bloque de 40 000 trabajadores del sector de la salud, desbrozando el camino espinoso de la política subversiva de estos tiempos matizados de nuevas tecnologías y redes sociales, que plantea que nuestros médicos y personal de salud son esclavos de la obra revolucionaria de Fidel.

Por ello, rencordamos, con creces aquel Concepto de Revolución, que nos legara para siempre, el eterno Comandante, porque es la base de nuestro patriotismo, de nuestro socialismo y de nuestro internacionalismo…

Y no faltó la compañía de la juventud, de los combatientes, de las mujeres y sus niñas y niños que con entusiasmo participaron de este multitudinario desfile.  Y otra vez nos acompañaron nuestros principales dirigentes, con Miguel Díaz-Canel, Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Presidente de nuestra República.

Y no faltó la entereza de un pueblo en apoyo a la causa justa del pueblo palestino, la denuncia a Israel por el acoso contra Palestina en los territorios de Gaza y Cisjordania. Su carácter nazista y guerrerista.

En un mar de pueblo se convirtió nuestro verde caimán antillano esta soleada mañana del Primero de Mayo de 2025, en la que, desde La Habana, mostramos al mundo que nos dicen Cuba porque llevamos a cuesta un país que nos identifica, que nos marca, y que nos define y por el que estamos dispuestos a darlo todo, hasta el último aliento de nuestra existencia, porque como somos martianos e hijos de mambises… ¡Aquí no se rinde nadie!...

Autor: Equipo de Gestión de Contenidos del Portal del Ciudadano
Fotos tomadas del sitio web Cubadebate.cu