En un mensaje contundente dirigido a las autoridades de todo el país, el miembro del Buró Político y Primer Ministro de la República de Cuba, Manuel Marrero Cruz, declaró que «no habrá tregua» en la lucha contra el delito, la corrupción, las ilegalidades y las indisciplinas sociales. La afirmación tuvo lugar durante la más reciente reunión del Grupo de Trabajo para la prevención y enfrentamiento a estos flagelos, efectuada desde el Palacio de la Revolución.

Marrero Cruz enfatizó que esta batalla debe ser constante y requiere la participación de toda la sociedad. "La batalla es día a día, minuto a minuto. La mejor manera de apoyar es que cada cual controle lo suyo, que cada cual exija que se cumpla lo establecido; esta batalla no es de órganos especializados, es de todo el mundo", señaló el Jefe de Gobierno, al tiempo que reconoció la labor de los combatientes del Ministerio del Interior y de las Fuerzas Armadas Revolucionarias en el mantenimiento del orden y la tranquilidad ciudadana.

Según reportes del Ministerio del Interior presentados en el encuentro, al cierre de septiembre se registró una disminución en todas las tipologías delictivas, aunque las cifras generales se mantienen elevadas. El objetivo primordial, se subrayó, sigue siendo la reducción de estos índices, por tratarse de un asunto de alta sensibilidad para la población.

El Primer Ministro insistió en la necesidad de "cerrar filas" ante cualquier manifestación de delito contra la economía. Hizo un llamado a profundizar en las causas que generan estos hechos y a fortalecer los mecanismos de control interno, con una activa participación de los trabajadores. "El delito económico es un tema de responsabilidad de todas las instituciones... Dondequiera que existan recursos y no sean correctamente administrados, vienen después los impactos", advirtió.

Uno de los puntos destacados de la reunión fue la presentación de una actualización del plan gubernamental para prevenir y enfrentar los delitos que dañan los recursos naturales. El análisis se centró de manera particular en la extracción ilegal de minerales, una actividad cuyas redes delictivas representan un serio riesgo y generan significativos impactos socioeconómicos negativos.

Al respecto, Marrero Cruz fue enfático al señalar la responsabilidad que compete incluso a entidades estatales. "Tenemos que arreciar más cuando existe una participación estatal. ¿Qué hacemos con el camión donde se transportaban todos esos elementos ilícitos? ¿Qué hacemos con la institución a la que pertenece? Este es un tema que nos hace mucho daño", cuestionó, convocando a sumar a todos los sectores de la sociedad para enfrentar esta violación.

Por su parte, Juan Carlos García Granda, Ministro de Turismo, informó sobre el comportamiento de los delitos que afectan a este sector estratégico. Precisó que se trabaja para hacer más efectivo el proceso de captación y control del personal vinculado a las áreas de economía, auditoría e inspección, como una vía para prevenir y detectar irregularidades.

Al concluir el encuentro, el Primer Ministro Manuel Marrero Cruz reiteró el carácter inquebrantable de la política del Estado cubano frente a las conductas antisociales. Su mensaje final dejó claro que la ofensiva del gobierno no cederá: no habrá espacio para la impunidad ni descanso en el combate para proteger los bienes de la nación y la estabilidad social.

Fuente: Periódico Granma.