Por : Marisol Ramírez Palacios.
Pancartas que piden el fin del bloqueo contra Cuba acompañaron buena parte de las manifestaciones que tuvieron lugar este domingo en Los Ángeles, California.
Así lo hizo saber al Portal del Ciudadano de La Habana, Mark Friedman, líder fundador del Comité Manos Fuera de Cuba, una de las organizaciones solidarias con la Isla Mayor de las Antillas que participaron en la jornada de protestas, las que abarcaron varias ciudades estadounidenses.
"El Comité Manos Fuera de Cuba de Los Ángeles (LAHOC) y activistas solidarios con Cuba en varias ciudades distribuyeron folletos titulados: “¡No a las deportaciones! ¡No a las sanciones! ¡Defendamos nuestro derecho democrático a protestar!”, comentó Mark a esta reportera.
Describe que "Cientos de organizaciones a nivel nacional se unieron a las protestas, desde pequeñas ciudades hasta grandes ciudades, incluyendo un número significativo de sindicatos, veteranos de guerra estadounidenses, organizaciones de libertades civiles y organizaciones comunitarias. Se estima que hubo hasta 5 millones de participantes.".
Mark destacó en su relato la intervención de Jason Corley, líder de Cuba Sí, en un mitin informal ante unas mil personas, en Madison Square Park, en el que habló sobre la lucha de más de 60 años de Cuba para poner fin al bloqueo económico, y otras sanciones destinadas a doblegar al pueblo cubano.
El folleto difundido por LAHOC recuerda que "Un memorando del Departamento de Estado de 1960 detalla cómo el bloqueo, en el caso de Cuba, fue diseñado explícitamente para negar «dinero y suministros… para reducir los salarios monetarios y reales, para provocar hambre, desesperación y el derrocamiento del gobierno».
"Ya tenemos más de 1900 protestas en todo el país. Estamos viendo un aumento vertiginoso de personas que se están presentando, que se preguntan: "¿Qué puedo hacer?", que están horrorizadas por lo que está sucediendo en Los Ángeles y que quieren alzar la voz.", relató el líder fundador del Comité Manos Fuera de Cuba. 
La organización (LAHOC), que integran en  su gran mayoría jóvenes norteamericanos, ha traído a La Habana donativos destinados, fundamentalmente, a aliviar el déficit de medicamentos y equipos médicos que provoca el bloqueo.