El Instituto Nacional de Ordenamiento Territorial y Urbanismo (INOTU), creado el 24 de agosto de 2021 a partir de la extinción del Instituto de Planificación Física, fortalece su misión en el marco del 65 aniversario de la actividad del Ordenamiento Territorial y Urbanismo en Cuba. Este organismo asume la gestión integral de aspectos relacionados con el diseño, la arquitectura, el catastro y ejerce un papel rector en el enfrentamiento a las ilegalidades dentro de su ámbito de competencia.

Recientemente, Carmen Agazagate Valdés, titular del INOTU en el municipio capitalino de San Miguel del Padrón, presentó al Consejo de la Administración un Plan Integral para enfrentar las ilegalidades en materia de ordenamiento urbano. Este documento rector tiene como objetivo planificar, organizar y coordinar acciones para prevenir, enfrentar y resolver las ilegalidades de manera rápida, además de educar a la población en este sentido. En este esfuerzo participan 12 entidades territoriales, con la fiscalía y tribunales como invitados. En San Miguel del Padrón, por ejemplo, se deben accionar sobre unas 1,500 ilegalidades de las 4,014 cuantificadas en el municipio, siendo las demarcaciones con mayor cantidad de violaciones, San Francisco de Paula, Luyanó Moderno y Diezmero.

El INOTU actúa como asesor técnico del gobierno en el cumplimiento del mandato constitucional, convocando, dirigiendo, aprobando y gestionando los instrumentos de ordenamiento territorial y urbano. Además, otorga solares, yermos para la construcción de viviendas a personas naturales, valora propuestas de modificaciones de coeficientes para la determinación del valor catastral y realiza las propuestas correspondientes. Su estructura se organiza en un órgano central con unidades subordinadas, delegaciones provinciales y direcciones municipales, fortaleciendo estas últimas como células básicas de la actividad del instituto.

El instituto tiene una jerarquía y subordinación vertical que le permite una mayor exigencia en el cumplimiento de la política estatal, así como mayor eficacia en la fiscalización territorial y en la prestación de servicios a personas naturales y jurídicas. Entre sus funciones está la dirección de la aplicación de políticas territoriales y urbanas relacionadas con el uso y destino del suelo, la elaboración, aplicación y control de la legislación en ordenamiento territorial, urbanismo y catastro, y la elaboración y control de procedimientos para otorgamiento de licencias y certificados.

El INOTU también representa a Cuba ante organismos internacionales y eventos relacionados con el ordenamiento territorial, urbanismo, asentamientos humanos, hábitat y catastro. Desde su creación, ha impulsado la capacitación constante de sus especialistas mediante escuelas ramales y filiales provinciales, aunque enfrenta desafíos como más de 300 cargos vacantes de técnicos medios.

La labor del instituto es fundamentalmente educativa y preventiva, orientada a ordenar y disciplinar el territorio sin reprimir, en consonancia con las orientaciones del Estado y Gobierno cubano. En este sentido, el presidente del INOTU, Raúl Omar Acosta Gregorich, ha expresado el compromiso con la informatización de los procesos para facilitar el acceso de la población a trámites en línea, mejorando así la eficiencia y el vínculo con la ciudadanía.

En el contexto del 65 aniversario de la actividad del Ordenamiento Territorial y Urbanismo, el INOTU continúa fortaleciendo su misión con un enfoque integral, apoyado por la legislación aprobada en 2021, como la Ley 145 del Ordenamiento Territorial y Urbano y la Gestión del Suelo, que regula esta materia con una visión integral y revolucionaria para Cuba.

Fuente : Periodista y plataforma de la Emisora COCO.