Cuando los vecinos del barrio Moro-Portocarrero, de Arroyo Naranjo, rodearon al Primer Secretario del Comité Central del PCC, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, y le agradecieron las importantes transformaciones sociales, constructivas y en varias esferas, el también Presidente de la República les dijo: “Entre todos hemos hecho mucho, pero la decisión tiene que ser avanzar”.

El Presidente cubano resaltó que todavía queda mucho por hacer, convocó a los vecinos a apoyar a las brigadas que allí realizan labores constructivas y puntualizó que transformación social de la comunidad se debe llevar a cabo de una manera organizada y con la calidad requerida evitando el despilfarro de los pocos recursos con que cuenta el país en obras que no cumplan con los objetivos planificados.

Insistió que se trata de una transformación en todos los órdenes, no solo en lo material, sino también en lo social y lo espiritual y, al resumir el objetivo de estas labores, enfatizó Díaz Canel “trabajar y cada vez ir quitando pedazos a los problemas que tenemos y buscar la prosperidad que merece el pueblo, e irnos por encima del bloqueo. Nos quieren seguir apretando con el bloqueo y vamos a seguir haciendo cosas por nosotros mismos, superando los problemas por nosotros mismos”.

Acompañaron al Presidente en su recorrido, el Primer Secretario del Partido en la capital y el Gobernador de La Habana, Luis Antonio Torres Iribar y Reinaldo García Zapata, respectivamente, así como autoridades del partido y el consejo de la administración del municipio.

La visita incluyó la bodega y un consultorio médico recientemente reconstruidos, la panadería, una tienda y varias viviendas en etapa constructiva. El barrio Moro Portocarrero es uno de los 133 en transformación con que cuenta La Habana y allí residen unas 6000 personas, aproximadamente.

(Foto tomada del perfil de Facebook del periodista Ricardo Gómez, de Tribuna de La Habana)

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