El código, en cuestión, se ajusta a las nuevas coyunturas de la familia cubana y servirá, como eficaz garante del derecho de todos los cubanos.

En especial refuerza el amparo legal a disímiles e inéditas formas de concebir la familia y asegura que cada singularidad de la célula filial o afectiva sea considerada en su real dimensión.

El proceso de consulta popular tiene lugar por estos días en toda la capital, donde se han previsto más de 78 000 puntos de reunión a nivel de circunscripción.

Al terminar este proceso el próximo 30 de abril, las recomendaciones surgidas llegarán a la Asamblea Nacional del Poder Popular y se fijará entonces la fecha para el plebiscito.

De ser aprobado, el nuevo código reemplazará al actual, por el que se ha regido la nación durante los últimos 46 años.

Ya están identificados  los integrantes de las comisiones electorales especiales de los municipios, y se crearon los grupos auxiliares de procesamiento de información a este nivel también.